Nuevo reportaje en la web: La reintroducción de la Vaca Pajuna en la Sierra de Baza
La ganadería bovina regresa a la Sierra de Baza, tras veinte años de ausencia
© Fernando Rodríguez Gutiérrez
Vacas Pajunas en camino hacia el Cortijo de Moras.
Publicamos un nuevo reportaje en la Revista Digital SIERRA DE BAZA, del que es autor Fernando Rodríguez Gutiérrez, Director de la Oficina Comarcal Agraria de Baza y Presidente de la Junta Rectora del Parque Natural Sierra de Baza, en el que se informa de la reintroducción de la vaca Pajuna en los prados alpinos de la zona silicícola del Parque Natural Sierra de Baza, en el entorno de la Dehesa de Moras, en las cuencas altas de los arroyos Moras (Cañada Larga) y Uclías (Cañada del Gitano), emplazadas a unos 1.900 metros de altitud, donde tras más de 20 años sin aprovechamiento bovino, a finales del pasado mes de mayo tenía lugar la reintroducción de unas 100 vacas con sus becerros de la raza “Pajuna”, para llevar a cabo un aprovechamiento estacional de pastos de verano en una superficie pastable de más de 1.000 hectáreas y con una duración de 7 meses al año, desde la primavera hasta el otoño.
La reintroducción de la Vaca Pajuna
© Fernando Rodríguez Gutiérrez
Rebaño pastando por el entorno del Cortijo Moras, al fondo de la imagen.
El joven ganadero Víctor Tapia conocía desde hace años tanto la raza Pajuna de la sierra como la finca de la Dehesa de Moras, ya que de vez en cuando acompañaba a su padre a comprar becerros precisamente a D. Juan Jiménez en la misma Dehesa de Moras. Y dado que actualmente estaban libres estos pastos y que la sequía de este año 2023 ha hecho que no hubiera alimento en casi ningún sitio, es lo que ha animado a Víctor a dar el paso de arrendar y aprovechar estos pastos naturales para sus vacas.
En el reportaje, muy documentado y con una colección de fotos muy ilustrativas tomadas a pie de monte, en el pasado mes de junio por el autor del reportaje, se informa de la iniciativa del joven ganadero Víctor Tapia, que ha permitido recuperar la presencia del ganado bovino en la sierra, y no de cualquier ganado, sino que se trata de vacas que están catalogadas como “Raza Autóctona Pajuna” , raza amenazada que es propia de la geografía andaluza (de Sierra Nevada y Sierra de Ronda principalmente) y también pastaba en la Sierra de Baza hace ya más de veinte años.
El aprovechamiento ganadero de los pastos, se va a centrar en la zona de las Cañadas Larga (arroyo Moras) y Cañada del Gitano (arroyo Uclías), donde se localizan grandes macollas de carices, localmente llamados juncias y por algunas personas confundidos con lastones, aunque no tienen relación botánica una especie con otra, de modo que los carices que aquí se localizan pertenecientes al género Carex, de los que la especie dominante es el que la especie predominante es el Carex camposii, aunque también está presente Carex cuprina y otras gramíneas como el cervuno (Nardus stricta), todos ellos pertenecientes a la serie Caricetum composii-cuprinae (OLMEDO COBO, J.A., 2019), que integran los borregiles y turberas silicícolas de alta montaña, un Hábitats de Interés Comunitario preferente (Código de la Unión Europea 6230_1*) y sobre el que puede ampliarse información pulsando AQUÍ.
Todos estos pastizales vivaces solo se los comen las vacas, pero no otros animales como el ciervo o el jabalí, por lo que al no aprovecharse en los últimos años se encontraba en un proceso acelerado de degradación, al no ser objeto de renovación natural por la rumia de los herbívoros, por lo que este aprovechamiento está muy adaptado al medio.
No obstante, antes de reintroducir las vacas en la Sierra de Baza, el ganadero ha tenido que obtener los correspondientes permisos, tanto en la Oficina Comarcal Agraria de Baza, como en la Dirección del Parque Natural, para obtener la autorización favorable de la actividad ganadera.
Vacas de la raza Pajuna
© Fernando Rodríguez Gutiérrez
El ganadero a caballo recogiendo a las vacas más rezagadas.
Como se pone de manifiesto en el reportaje, la vaca Pajuna es una raza de ganado de montaña que vive en libertad, destacando su rusticidad y adaptación a la sierra, alimentándose al 100% de pastos naturales, lo que confiere un sabor único a su carne. Además es una vaca con una alta facilidad de parto y una gran aptitud maternal para la cría del ternero.
En el reportaje, entre otras curiosidades, se cuenta que el nombre de “pajuna” tiene su origen en “paje” o “vaca de servidumbre” donde antaño tenía una triple aptitud para el sustento de las familias que vivían en los cortijos serranos: fundamentalmente eran animales de tiro y labranza, pero también proporcionaban leche y carne que eran la base de la alimentación en aquellos años de carestía.
También se destaca que la calidad y sabor de la carne de esta vaca es muy superior en todos los aspectos (frente a las vacas estabuladas criadas con piensos), pues la pajuna es una vaca serrana criada en libertad que se alimenta en su totalidad con pastos naturales y bebe las aguas de los manantiales de montaña: todos los recursos los aporta la sierra.
Además tiene un gran beneficio ambiental: abre el monte, limpia malezas y elimina combustible reduciendo considerablemente el peligro de incendios forestales, a la vez que mantiene el ecosistema y la biodiversidad de los espacios naturales.
Puede accederse al reportaje sobre las Vacas Pajunas reintroducidas en la Sierra de Baza, de Fernando Rodríguez Gutiérrez, pulsando AQUÍ.
- Creado el .