Lugares de interés del entorno
Barranco del Espartal
Por José Ángel Rodríguez
Las popularmente llamadas Cuevas de las Ventanas en el Barranco del Espartal.
© José Ángel Rodríguez
Con el nombre de Barranco del Espartal se conoce una rambla yesífera de la Depresión de Guadix-Baza, que se localiza en un paraje de la Hoya de Baza entre las inmediaciones del Río de Baza, entre las proximidades de la A-92N dirección Murcia a Baza y el Río de Baza.
Barranco del Espartal, en la que destaca el hábitat de matorral árido arbustivo y subarbustivo sobre yesos que aquí se localiza y presenta una alta biodiversidad y endemicidad tanto en especies vegetales como animales, particularmente artrópodos (amplio grupo que incluye a animales como insectos, arácnidos, crustáceos o miriópodos, entre otros invertebrados).
Toda esta zona, cuenta con una superficie de 668 Has. y sobre ella se ha dicho que sintetiza todas las peculiaridades del ecosistema salino y estepario sobre yesos "único en Europa" y como tal protegido por las Directivas Comunitarias, por lo que se ha propuesto la declaración de este lugar como monumento natural, así como microreserva, al tratarse de un lugar de gran importancia para determinadas especies de invertebrados, “como estrategia adecuada para completar la Red de Espacios Protegidos de Andalucía, al estimarse que aquí viven especies animales que quedan fuera de las áreas de los espacios protegidos de la comunidad (Departamento de Biología de la Universidad de Madrid, López et al.).
Esta zona también es también conocida con el nombre de Barranco de las Cuevas de las Ventanas, por localizarse en la pared derecha, sentido descendente de una de las zonas más quebradas del barranco una serie de cuevas que se abren en la pared, a modo de ventanas, tal y como se representa en la imagen con la que comenzamos esta breve reseña sobre tan singular lugar. El origen de estas cuevas, a las que se accedía por cuerdas y escalas desde la parte superior de la planicie que rodea el Barranco del Espartal, no está bien estudiado, y aunque se ha apuntado que son prehistóricas (así lo señala Magaña Visbal en el Tomo I de su Baza Histórica) es posible que sean medievales, de origen almohade, como otras cuevas de la zona: las Cuevas de las Hafas de Puente Arriba en Benamaurel, las Cuevas de la Morería en Castillejar o las Cuevas de los Algarves de Gorafe, con las que presentan grandes similitudes constructivas y adaptativas, encontrándose excavadas, unas y otras, en acantilados de yeso.
Paisaje del Barranco del Espartal con su característica vegetación y flora yepsícola, propia de la zona de yesos del paraje.
© José Ángel Rodríguez
Toda esta zona es el hábitat de las llamadas plantas gipsófilas (yepsícolas), de gran belleza y espectacular floración primaveral como el arnacho (Ononis tridentata), la oruga blanca (Eruca vesicaria), planta nutricia de la mariposa Baza (Euchloe bazae), el alelí de los yesos (Erysimun sps.), la jarilla (Heliantemun equamatum), junto con plantas halófilas, propias de ecosistemas salinos, como la siempreviva (Limonium majus), planta que se describe en el Libro Rojo de Especies Vegetales Amenazadas con el número 170 de ficha, en la que se indica como sólo se conoce su presencia en la Hoya de Baza, donde se localiza a una altitud de 700-800 metros. Se trata de un hemicriptófio, de la familia de las plumbagináceas, con hojas basales agrupadas, que tiene unas llamativas flores azuladas, cuya inflorescencia se agrupa en racimos que se levantan unos 50 cms. del suelo, que se utilizan como flor seca, para composiciones florales y que entre otros lugares de la Hoya de Baza, podemos localizarlo aquí, en floración en junio-julio.
Entre la flora del Barranco del Espartal, nos llamará la atención un amplio catálogo de plantas parásitas, con floración espectacular, en primavera. Se trata de plantas que se alimentan de las raíces de otras plantas, particularmente del género de las jaras (Cistus), en que se parasitan, por lo que no precisan hojas, careciendo de clorofila, y tan solo cuentan con un eje floral muy desarrollado. El ciclo biológico de este tipo de plantas está formado por dos grandes fases: una primera subterránea (germinación, fijación en las raíces de la planta hospedante, penetración en los tejidos y desarrollo de los chupadores con los que extraerá los nutrientes) y una segunda fase aérea (salida de la yema, crecimiento del tallo, floración y fructificación).
Ejemplar macho de lagartija colirroja, la más abundante de los reptiles de la zona, fotografiado en el Barranco del Espartal.
© José Ángel Rodríguez
Aquí se localizan especies de mamíferos como el conejo de monte (Oryctolagus cuniculus), el ratón moruno (Mus spretus) o el zorro (Vulpes Vulpes) y más recientemente ha sido colonizado por el jabalí (Sus scofra) y la cabra montés (Capra pyrenaica) cuya presencia es fácil de detectar moviéndose entre los acantilados de los barrancos, guardando la distancia con el hombre, gracias a su especial facilidad para moverse por las paredes verticales; las aves están también muy bien representadas y anidan en los acantilados de la zona colonias de grajillas, y aves esteparias como la collalba negra. Aquí nidifican también algunas rapaces diurnas como el cernícalo vulgar.
La comunidad de los reptiles, también es especialmente rica con especies como el lagarto ocelado (Timon lepidus), o la lagartija colilarga (Psammodromus algirus), aun cuando el réptil más representativo y frecuente en este paraje es la lagartija colirroja (Acanthodactylus erythrurus), una especie adaptada a estos ambientes a las altísimas temperaturas que se registran en el valle en las horas centrales del día desde mediados de primavera hasta bien entrado el otoño.<
La principal riqueza e interés de la zona es por los Invertebrados
No obstante la rica fauna de vertebrados de estas ramblas yesífera, la importancia e interés de esta zona, faunísticamente hablando, lo es particularmente desde el punto de vista de la fauna de invertebrados que aquí se localiza hasta el punto de que en la publicación ALTIPLANO ESTEPARIO. Ambientes Semiáridos del Sureste Andaluz (C.M.A., Junta de Andalucía, 2010), se señala en su pág. 364 como el Barranco del espartal presenta una excepcional riqueza y singularidad de especies correspondientes a diferentes órdenes. “De hecho, este paraje se sitúa entre las tres zonas con mayor número de especies amenazadas de Andalucía, con un total de diez (Barea et al, 2008)”.
En el Libro Rojo de los Invertebrados de Andalucía, editado por la Consejería de Medio Ambiente (Sevilla, 2008), se destaca a la Hoya de Baza, en general, como “uno de los puntos más importantes de Andalucía para los invertebrados” (Tomo III pág. 103), destacando como en este territorio podemos encontrar la presencia de especies endémicas de extraordinario interés debido a su estrecha asociación con estos exclusivos ecosistemas como los lepidópteros Euchloe bazae, Caradrina (Eremodrina) distigma, Coscinia romeii y Heterogynis andalusica; además de los coleópteros Longitarsus tunetanus, Scarabaeus puncticollis o Meloe (Eurymeloe) nanus o el ortóptero Sphingonotus octofasciatus, por destacar algunos ejemplos más representativos que se citan en la publicación citada (pág. 146) y que están presentes aquí. Los arácnidos también están muy bien representados en esta comunidad con algunas especies muy estudiadas por la comunidad científica, por su interés, como la llamada viuda negra (Latrodectus lilianae) o la llamada araña moteada saltadora (Eresus cinnaberinus), de cuyos trabajos puede ampliarse información AQUÍ.
Un lugar en peligro de supervivencia
Detalle de la reciente roturación del terreno que se ha llevado a cabo en la zona de antiguos prados primaverales.
© José Ángel Rodríguez
En toda la zona baja del barranco, o cañada del Espartal, como también es llamado en la zona, se localizaba, decimos se localizaba puesto que ha sido labrado el terreno la pasada primavera hasta en dos ocasiones para eliminar todo vestigio de la vegetación natural que aquí existía, unos interesantes pastizales anuales primaverales de Polypogono maritimi-Hordeetum marini, Parapholido incurvae-Frankenietum pulverulentae, una comunidad que estaba presente en la zona roturada y que está protegida legalmente por la Directiva Europea de Hábitats y la legislación nacional. Estos hechos han sido denunciados ya por la Policía Local de Baza, al infringir las previsiones del Reglamento Forestal de Andalucía, por lo que esperamos se actúe con el rigor y contundencia que merece un hecho de este tipo, y más para que sirva de freno a futuros desmanes en esta zona amenazada por el intento de ponerla en nuevos cultivos de regadío, lo que supondría la destrucción de esta comunidad tan singular como antigua, y se intente reponer el lugar dañado a su estado anterior, en lo posible, aunque estimamos va a ser muy difícil su recuperación, dada la magnitud de tan incomprensible como irregular actuación.
Por nuestra parte y tras una visita a la zona, la que ya conocíamos profundamente ante de la irregular actuación, estimamos que son irreparables los daños ocasionados en el propio paraje y de un modo particular a la importante la flora y especial ente a la fauna endémica que aquí se localizaba y que aparecía asociada al mismo. Ya que con esta actuación han desaparecido de forma total, o casi total, algunas especies de invertebrados en peligro de supervivencia y como tales protegidos.