Etnobotánica de la Sierra de Baza
Fichas de Flora - Plantas del Parque Natural Sierra de Baza
Helecho macho (Dryopteris filix-mas)
© José Ángel Rodríguez
Helecho macho en su hábitat característico de la Sierra de Baza
PROYECTO SIERRA DE BAZA
01/05/2022
Con el nombre de helecho macho, se conoce e los más comunes de los helechos, perteneciente a la familia Dryopteridaceae, la que se caracteriza por tener rizomas rastreros, ascendentes, o erectos, a veces escandentes o trepadores, con escamas no clatradas en los ápices.
El helecho macho es natural del hemisferio norte templado, prefiere para crecer zonas sombreadas, en el concreto caso del Parque natural Sierra de Baza, casi exclusivamente se localiza en pequeñas oquedades de las rocas, a modo de nicho, donde encuentra la sombra y humedad necesaria, siendo una especie propia de la zona silicícola de este espacio protegido, estando prácticamente ausente o siendo muy raro en la zona calcícola del macizo central.
El nombre popular de esta especie de “helecho macho" es utilizado para diferenciarlo de otra especie con la que se asemeja, y que se estima es más delicada, conocida como “helecho hembra”: Athyrium filix-femina.
Posee un rizoma rollizo y grueso, confundiéndose con la raíz, y da origen a frondes pecioladas, primero enrolladas como cayado y cubiertas de escamas castañas. Las hojas tienen un hábito de crecimiento ascendente, alcanza una longitud máxima de 15 dm, con una sola corona en cada pie de raíz. Son bipinnadas, con 20-35 pinnas en cada lado del raquis. Las pínulas son algo romas, y lobuladas iguales en todo su contorno. Los culmos se cubren con escamas anaranjadas beige. En la cara abaxial de las láminas maduras se desarrollan en dos filas 5 a 6 soros. Cuando las esporas maduran, entre agosto a noviembre, el indusium comienza a secarse, ayudando en la dispersión de las esporas.
Usos etnobotánicos
© José Ángel Rodríguez.
Del helecho macho eran aprovechados sus rizoma y las hojas, en decocción y en emplastos. Teniendo como componentes activos aspidinol, filmarona, taninos, aceites esenciales, y particularmente es rico en filicina, habiéndose utilizado en la antigüedad como antihelmíntico y también para combatir las lombrices, usos que se encuentran hoy en día totalmente desaconsejados, al no estar claras estas utilidades y por el contrario resultar algo tóxico y presentar algunas contraindicaciones, por lo que debemos de abstenernos de su uso en medicina popular.