Etnobotánica de la Sierra de Baza
Fichas de Flora - Plantas del Parque Natural Sierra de Baza
Lamio (lamium amplexicaule)
© José Ángel Rodríguez
Lamium amplexicaule en floración en su hábitat natural.
También conocida con los nombres de ortiga muerta, conejitos, gallitos… es una planta anual de unos 5 a 20 cm, con frecuencia pubescente, al tener su superficie vellosa, cubierta de pelos finos y suaves. Se reconoce por sus hojas redondeadas, las cuales son más anchas que largas, claramente opuestas; las brácteas parecen una especie de cazuelas que envuelven las flores, las cuales tienen un tubo muy largo, son de moradas y acabadas en dos labios muy abiertos. La floración es muy temprana, ya que a finales del invierno y comienzo de la primavera comienza a adornar con sus coloridos los campos
El lamio se considera una planta nitrófila, que crece en campos y tierras cultivadas, también en terrenos abandonados y cunetas de carreteras, al comportarse como ruderal.
Lamium es un género de una treintena de especies aceptadas, de las más de 300 descritas de plantas de la familia Lamiaceae. Todas son herbáceas, nativas de Europa, Asia, y norte de África. Encontrándose ampliamente naturalizadas en las regiones templadas del planeta. Su nombre científico proviene del griego, y significa "boca abierta", por la forma de sus flores.
USOS ETNOBOTÁNICOS
© José Ángel Rodríguez
Detalle de la flor del Lamio, en la que se aprecia su característico aspecto, en forma de boca.
El Lamium amplexicaule es una planta herbácea, rica en vitamina C y en potasio, de la que se ha consumido la raíz y las hojas, al ser comestibles, habiéndose utilizado en ensaladas, para su consumo crudo, pero también cocida.
Con las flores también se preparan infusiones. Pio Font Quer en su célebre obra “El Dioscórides Renovado”, se ocupa de forma profusa del Lamium album, popularmente conocido como Ortiga Muerta y Ortiga Blanca, destacando como los Lamium, con aspecto de ortiga, pero sin pelos urticantes, son conocidos desde remotos tiempos y a él alude Dioscórides en su libro IV capítulo 96, señalando como “por tener las flores púrpuras, debe de ser Lamium masculata de los autores modernos”. Este mismo autor señala que las flores deben de recolectarse poco después de abrirse, al estimar que después pierden sus propiedades, pero siempre “en un día seco, con el cielo claro y ya bien entrada la mañana, cuando el rocío si lo hubiera habido ya se haya desvanecido”.
Se estima que esta planta tiene propiedades antisépticas, antiinflamatorias, diuréticas y depurativas, por lo que se ha utilizado para favorecer la micción, en trastornos menstruales, así como en problemas intestinales.