Fichas de Aves del Parque Natural Sierra de Baza
Terrera marismeña (Calandrella rufescens)
© Antonio de la Cruz Lozano
Ejemplar adulto de Terrera Marismeña
FICHA TÉCNICA:
Orden: Paseriformes.
Familia: Alaudidae.
Especie: Calandrella rufescens.
Estado de conservación: En el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas figura con la categoría "De Interés Especial". En el Libro Rojo de las Aves de España (2004) está catalogada como “casi amenazada”.
Longevidad: Hasta 5 años.
Peso: 20 – 25 gr.
Envergadura: 30 cm.
Longitud: 12 - 15 cm.
DISTRIBUCIÓN
© Antonio Sales
La Terrera Marismeña es una especie escasa en la Península Ibérica, único lugar de Europa donde podemos localizarla.
La Terrera Marismeña está presente en el norte de África y algunas zonas de Asia, sus poblaciones europeas únicamente habitan en la Península Ibérica. En nuestro pais se distribuye por el sureste y suroeste de Andalucía, zonas estepáricas del Ebro y de Castilla la Mancha, en España habitan tres subespecies, la subespecie apetzii habita en la península ibérica mientras que las otras dos especies que habitan el Archipiélago Canario, rufescens en Tenerife y polatezki en Canarias…estando estas dos últimas especies en estado crítico de extinción.
CARACTERÍSTICAS ANATÓMICAS
© Antonio Sales
Terrera Marismeña, en la que se aprecia el característico moteado que tiene en el pecho, que la diferencia de la Terrera Común.
Es un pequeño Alaúdido es muy similar a la Terrera común y prácticamente lo único que la diferencia de ésta es el moteado negro que presenta en el pecho siendo las zonas ventrales blanquecinas, mientras que en las partes superiores muestra tonos blanquecinos combinados con grises y pardos.
La cara y cuello es de color claro con una ceja y lista ocular débilmente marcada. Píleo castaño estriado que eriza levemente en estado de excitación.
Pico tipo fringílido, no demasiado largo, de aspecto robusto y de color ocre claro.
Los ojos son de color castaño oscuro y están completamente rodeados de una franja de color claro.
Las patas son de un tono pálido y aspecto robusto.
HÁBITATS NATURALES
© José Ángel Rodríguez
Hábitat característico de la Terrera Marismeña en el Parque Natural Sierra de Baza (Granada)
El hábitat de la Terrera Marismeña es en gran medida exclusivo y se limita a zonas agrícolas abandonadas y degradadas, eriales, dunas costeras y sobre todo áreas de naturaleza estepárica, donde se establece en terrenos de vegetación baja como tomillares y espartales entre otras pequeñas plantas propias de ese hábitat, también deben ser llanas o poco onduladas…es posible que su próxima extinción se deba en mayor parte a la destrucción de estos hábitats tan escasos en nuestro país.
NIDIFICACIÓN
© Juan Emilio Checa
Nidos muy modestos, construidos directamente sobre el suelo, son propios de la Terrera Marismeña
La nidificación comienza por el mes de abril, al amparo de algún pequeño arbustillo o mata utilizando cualquier pequeña depresión y tapizándolo de plumillas, pelo y pequeñas briznas de hierba seca y siempre en el suelo, de hecho son muy similares a los nidos de otros alaúdidos como alondras o cogujadas. La puesta consiste por lo general de entre 3 y 4 huevos de un blanco amarillento con motitas de marrón oscuro, tras su eclosión los pollos son cuidados por ambos progenitores aunque la incubación corresponde normalmente a la hembra. Tras10 dias aproximadamente las jóvenes Terreras Marismeñas abandonan el nido.
ALIMENTACIÓN
© Antonio Sales
Ejemplar adulto de Terrera Marismeña
La dieta de la Terrera Marismeña se basa en semillas e insectos y como los demás alaúdidos, también suele consumir más insectos en periodo de cría y época estival, mientras que en el invierno son más abundantes en su dieta las semillas silvestres.
CANTO
El canto de la Terrera Marismeña es de los más bonitos de las aves que pueblan su hábitat. Es una mezcla de trinos y pequeñas notas estridentes que nos podrían recordar al Pardillo Común y demás fringílidos…sin embargo su canto más identificativo consiste en un simple “prrrrrr”, que la distingue claramente de cualquier otra ave y que suele realizar al sentirse amenazada.
LA TERRERA MARISMEÑA EN LA SIERRA DE BAZA
© Juan Antonio Dengra
Terrera Marismeña fotografiada en los terrenos esteparios de la Hoya de Baza (Granada)
En la Sierra de Baza apenas hay hábitats de cierto porte y extensión para albergar a esta magnífica avecilla, aún así, aunque de manera escasa y muy localizada, podamos escucharla en las zonas mas bajas que coincidan con tomillares, espartales y zonas de estepas más o menos llanas. También está documentada la presencia de esta especie en este territorio y en el Plan de Ordenación de los Recursos Naturales del Parque Natural Sierra de Baza (apartado 2.1.8 FAUNA) se cita a la Terrera Marismeña (Calandrella rufescens) como una de las más singulares especies de la avifauna presentes en el Parque Natural Sierra de Baza.
UNA PEQUEÑA REFLEXIÓN FINAL
Reproducción de la pág. 130 de la publicación “Aves Esteparias de Andalucía”, en la que se reproduce el mapa de la ZIAE (Zona de Importancia para las Aves Esteparias) nº 18, Hoya de Baza.
No debemos olvidar que durante la primavera se suelen llevar a cabo trabajos agrarios como rular la tierra entre otras acciones, estos hechos afectan muy negativamente no sólo a la Terrera Común y Marismeña, sino a otras muchas aves que comparten estos singulares hábitats esteparios, destrozando masivamente sus nidos. En mi modesta opinión cabe instar, una vez más, a la administración pública para que durante esta época se limiten lo máximo posible estas acciones en el campo, ya que a medio y largo plazo están poniendo en serio peligro de extinción a estas bellísimas aves y por extensión a todas las que comparten su mismo hábitat. Del mismo modo creo que no hace falta decir el serio problema que también supone la transformación de secanos y estepas en zonas de regadío y el arrase constante de estos hábitats por parte de la agricultura intensiva.
Valga de ejemplo la lamentable destrucción del Humedal del Baíco que trajo por consiguiente la extinción de la Alondra de Dupont (Chersophilus duponti) en la Hoya de Baza y la práctica extinción de algunas otras especies más de la avifauna. Como se puede ver, en el Humedal aún ese desastre medioambiental sigue en pleno auge, con aparente impunidad y sin que aparentemente la administración tome cartas en el asunto…podríamos decir que las buenas palabras se las llevó el viento…como suele pasar en la vida política, más aun cuando se aproximan elecciones, pero eso es otra historia, por suerte cada vez es mas difícil engañar a Homo sapiens…ya que nosotros también vamos evolucionando…vayan estas palabras en recuerdo Charles Darwin, por suerte para nosotros (y quien sabe si para desgracia de ALGUNOS políticos) no somos ajenos a su teoría de la evolución.
© Texto: Juan Antonio Dengra Martínez
Monitor de educación ambiental y guía local en el Altiplano de Granada