Skip to main content

Comprar Guía >> |  Mapa Web >>Buscar >>Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo. |

Edición Mensual - Año XXVII | Nº 297 - Marzo 2024

FICHAS

imagen de decoración

Fichas de Aves del Parque Natural Sierra de Baza

Pardillo común (Carduelis cannabina)


© José Ángel Rodríguez
Ejemplar adulto macho de Pardillo común con su plumaje primaveral.


FICHA TÉCNICA:

Orden: Passeriformes
Familia: Fringillidae
Especie: Carduelis cannabina
Estatus: especie catalogada de interés especial.
Longevidad: pueden vivir hasta tres años.
Peso: 21 grs., aproximadamente.
Envergadura: con las alas abiertas pueden medir alrededor de 24 cms.
Longitud: 13 cms. aproximadamente.


DESCRIPCIÓN DE LA ESPECIE 

El pardillo común es un ave de pequeño tamaño, que destaca visualmente por las manchas de color rojo intenso en el pecho y en la frente de los machos en la época reproductora, que cambia e intensidad a lo largo de la misma, como se puede apreciar en la siguiente imagen. Su dorso es de color naranja pálido y en su cabeza predomina el color gris claro con una pequeña mancha clara en la mejilla. La hembra es de tonos algo más apagados que el macho y está ausente el característico color rojo de los machos por lo que presenta un acusado dimorfismo sexual que permite su fácil identificación de campo. Los ojos y el pico son de color oscuro al igual que las patas. La cola es oscura con bandas blancas a los lados. Aun cuando se hace necesario destacar que las variaciones individuales son considerables, y el desgaste del plumaje también puede cambiar los tonos de la coloración. 

 

© José Ángel Rodríguez
Dos machos de pardillo común luciendo plumaje primaveral (abajo) y estival (arriba). 

El hábitat  característico del Pardillo común son los campos de cultivo, zonas agrícolas y terrenos no excesivamente boscosos, donde pueda encontrar semillas silvestres de herbáceas, su principal alimento. Tiende a sobrevolar los campos utilizando los árboles como posaderos. 

© Juan Cubero
Pardillo común oteando desde su posadero. 

Desde el mes de abril al mes de junio se produce el periodo de cría. Llegado el mes de abril construye el nido a poca altura e incluso a ras de suelo junto a un arbusto, que le de una mínima protección. El nido suele ser pequeño, construido solo por la hembra, cubierto de tallos y raíces. La puesta será de cuatro a seis huevos y serán incubados por la hembra, la que será la que se encargue de la incubación durante doce días. Los pollos al nacer son alimentados por ambos congéneres a base de semillas y larvas de insectos. 

© Agustín Orduña
Imagen de un Pardillo común en la que se aprecia la gran mancha de color rojo en su pechera y frente. 

La alimentación de esta especie se basa en semillas que toman de los arbustos y plantas herbáceas que hay en su territorio, también comen insectos, preferentemente sus larvas. Se le puede observar comiendo en el suelo, dando pequeños saltos por el terreno. 

© José Ángel Rodríguez
Hembra de pardillo limpiando su plumaje primaveral en una charca de agua. 

El vuelo es ondulante, dando fuertes aleteos que terminan bruscamente cuando decide posarse en el suelo. 

El canto es bastante agradable, con gorgojeos y trinos muy musicales que le han hecho ser pájaro de jaula en muchos lugares. 

© Eduardo Nogueras
Grupo de aves bebiendo en una charca de agua entre los que se encuentran un macho y una hembra de pardillo común, junto a un verderón y un jilguero.


EL PARDILLO COMÚN EN LA SIERRA DE BAZA 

© Juan Cubero
Pardillo fotografiado en la Sierra de Baza. 

El Pardillo común es un ave presente en la Sierra de Baza, se le puede considerar sedentario  y  abundante. Se puede detectar fundamentalmente en el piso mesomediterráneo, pero no a demasiada altitud, eso sí, necesita zonas poco arboladas y de terrenos donde haya plantas arbustivas. Se trata de un ave que alcanza su mayor presencia en la Sierra de Baza de octubre a marzo debido a los pequeños movimientos migratorios que se producen en Europa, al unirse a las poblaciones locales los migratorios invernantes. 

Texto: Eduardo Nogueras Ocaña

© 2011 PROYECTO SIERRA DE BAZA Todos los derechos reservados