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Edición Mensual - Año XXVI | Nº 305 - Noviembre 2024

FICHAS

imagen de decoración

Etnobotánica de la Sierra de Baza

Fichas de Flora - Plantas del Parque Natural Sierra de Baza

Patagallo (Pallenis spinosa)



© José Ángel Rodríguez
Detalle de la flor espinosa del patagallo, de donde toma su nombre científico de spinosa.

PROYECTO SIERRA DE BAZA
01/04/2024

El patagallo, también conocido como falsas árnicas y estrellada espinosa, por la característica forma de estrella espinosa que presenta su flor, rodeada por unas características hojas espinosas, que parecen formar parte de la flor, aun cuando se trata de hojas, como venimos comentando. 
Se trata de una planta anual, perteneciente a la familia de las asteráceas, que alcanza los 60-70 cm., considerada como ruderal y arvense, que podemos localizar en cunetas, junto a caminos, en lindes de los campos de cultivo en herbazales subnitrófilos y, en menor medida, en roquedos y pedregales, desde el nivel del mar hasta los 1400/1600 de altitud.

La Pallenis spinosa tiene hojas lanceoladas, alternas, vellosas, las inferiores pecioladas, estrechamente elípticas, de hasta 7,5 cm de largo y las superiores lanceoladas, sésiles, semiabrazadoras, de hasta 4 cm de largo, de punta punzante cuya función es proteger la flor ante la herbivoría. Sus flores, que aparecen de marzo a septiembre, son de un característico color amarillo, dando lugar a múltiples frutos, llamados cipselas, especialmente diseñados para propagarse por el viento, de unos 2 mm de largo.

Usos etnobotánicos


© José Ángel Rodríguez
Planta del patagallo en su hábitat natural de la Sierra de Baza.

Se considera una planta con propiedades desinfectantes, por lo que se ha usado contra enfermedades bucales y caries dentales, para lo que se realizaban enjuagues bucales con la infusión de la planta. También se aplica en cataplasmas para tratar golpes y zonas doloridas, tanto en animales como en humanos, aun cuando el principal uso es veterinario, para tratar contracturas y golpes, especialmente en las caballerías, para lo que se preparaban macerados y cataplasmas con las flores, con las que se daban friegas y unturas en la zona afectada del animal.